Pirates of Silicon Valley

La película nos propone una manera de ver lo que se vivió en aquellos años, donde la era de la informática empezaba a cobrar importancia. Si bien los tiempos evidentemente no son los mismos que en la actualidad, las personalidades de los dos principales protagonistas son claramente identificables.
Al ver cómo se ha ido desarrollando, a lo largo de los años, la historia de estas dos compañías, no podemos evitar encontrar relaciones con las personalidades de ambos fundadores. Ambos visionarios, con una idea clara de a qué es lo que quieren dedicarse por el resto de sus vidas, van utilizando las habilidades que tienen para lograr su objetivo. Ambos, con una capacidad científica, por decirlo de algún modo, bastante reducida, pero con habilidades que terminan por ser esa diferencia entre las demás compañías.

Steve Jobs, por su parte, presenta una forma de ser un tanto orgullosa. Quizás su habilidad más significativa para el desarrollo de su empresa, es esa visión de su trabajo como el sentido de su existencia. Él entiende el momento en que está viviendo como un parte-aguas en la historia del hombre, y más enfocado a su persona, como la razón de su existencia. Bill Gates, por otro lado, pienso que ve la situación como algo de lo que se puede aprovechar. No le toma tanta importancia en términos metafísicos, sino que ve las cosas prácticamente: una mina de oro.
Es admirable, por parte de los dos, cómo dejan su “vida cómoda” para aventurarse en formar una nueva empresa, en donde pocas empresas se habían preocupado, y saltan como los pioneros en el terreno de la computación. Apple enfocado en crear ARTE, y Microsoft dándole la importancia necesaria, como parte fundamental de un ordenador, al software.